CIPP
Cured-In-Place Pipe (CIPP)
El CIPP (Cured-In-Place Pipe) es una tecnología avanzada de rehabilitación de tuberías sin zanja que revoluciona la manera en que se restauran redes de agua potable y alcantarillado. Este método permite la creación de una nueva tubería estructural dentro de la existente, eliminando la necesidad de excavaciones invasivas y reduciendo significativamente los costos y tiempos de ejecución.
El proceso comienza con la inspección de la red mediante cámaras de alta tecnología para identificar problemas como fisuras, infiltraciones o corrosión. Luego, las tuberías son limpiadas cuidadosamente con equipos de alta presión para asegurar que el interior esté en condiciones óptimas.
Un liner flexible, impregnado con resina termoendurecible, es introducido en la tubería existente y luego curado mediante calor o luz ultravioleta. Este curado solidifica el liner, creando una nueva tubería resistente y de alta durabilidad, capaz de soportar presiones y condiciones exigentes por más de 50 años.
Beneficios del CIPP:
Sin interrupciones significativas: El proceso minimiza el impacto en la superficie y reduce molestias para los usuarios y la comunidad.
Eficiencia operativa: Se ejecuta en menos tiempo que los métodos tradicionales, ahorrando costos de mano de obra y maquinaria.
Sostenibilidad: Reduce el uso de materiales y elimina la necesidad de retirar tuberías viejas, disminuyendo la huella ambiental.
Durabilidad: Prolonga la vida útil de las redes hasta en cinco décadas, gracias a materiales de alta calidad.
El CIPP es ideal para proyectos de rehabilitación en entornos urbanos, donde la interrupción del tránsito y la infraestructura debe ser mínima. Además, es una solución versátil que se adapta a diversos diámetros y materiales de tuberías, garantizando resultados consistentes y de alta calidad.